El que tenga oídos, que oiga. (Mateo 13, 9)Solemos decir "Dios no me escucha". Pero, ¿escuchamos nosotros a DiosÉl constantemente nos habla. Basta abrir al Biblia y leer para escucharlo. O atender lo que nos dice el corazOn, porque Dios le habla al corazOn del hombreBien lo decía un amigo: "No es lo mismo escuchar de Dios, que escuchar a Dios". Es hora de afinar nuestros oídos. Dios tiene mucho que decirnos.